COCEMFE se adhirió al manifiesto del CERMI con motivo del Día de la Discapacidad y numerosas de las entidades de la Confederación también lo hicieron. Entre ellas la Federación Española de Asociaciones de Espina Bífida e Hidrocefalia (FEBHI), la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH), la Federación Nacional ALCER, la Fraternidad Cristiana de Personas con Discapacidad (FRATER), la Federación Española de Enfermedades Neuromusculares (Federación ASEM), DISCAFIS COGAMI, COCEMFE Comunidad Valenciana, Andalucía Inclusiva COCEMFE, COCEMFE Catalunya, FEGRADI COCEMFE Granada, COCEMFE Ciudad Real, COCEMFE Alicante, ASEM Galicia y la Asociación de Lúpicos de Asturias (ALAS), entre otras.
Carmen Gil, presidenta de FEBHI, destaca “la importancia de poder contar con los recursos/apoyos precisos de forma gratuita para que las personas con discapacidad, y en concreto con Espina Bífida, puedan trabajar para mejorar su grado de autonomía”. En este sentido, FEBHI está preparando “un informe actualizado de necesidades del colectivo que incluye estos puntos”, y que presentará “próximamente al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad”.
La presidenta de FNETH, Eva Pérez Bech, explica que “el actual modelo debe cambiar a otro orientado a la prevención de las situaciones de dependencia, en el que se promueva la autonomía de las personas, aportando mucho más relevancia a la figura del asistente personal”.
Basilisa Martín, presidenta de Frater España, subraya que “si se atendiera a las personas en situación de dependencia que aún están en espera, se generarían decenas de miles de empleos directos nuevos. Asimismo el trabajo de la mujer en los cuidados de las personas con dependencia puede suponer un lastre para ellas ya que esta tarea no es voluntariamente elegida, ha perdido el apoyo que conllevaban las cotizaciones a la seguridad social y se ha convertido en una imposición social y económica”.
Javier Segura, presidente de COCEMFE CV, ha lamentado la posición de desventaja en esta ley en la Comunitat Valenciana: “Llevamos años situados en el último puesto en la aplicación de la Ley de Autonomía Personal y Dependencia, y, aunque se han tomado medidas para una puesta al día, la labor que queda es grande y debemos garantizar entre todos el acceso a los derechos que asisten a los más vulnerables de nuestro colectivo en virtud de esta ley”, ha señalado.
La Presidenta de DISCAFIS-COGAMI, Laura Quintas, explica que “hay que reevaluar los copagos. Las personas con discapacidad no tenemos que afrontar un sobrecoste por nuestra situación individual. Nadie elige la discapacidad, el sistema de bienestar debe garantizar la igualdad de oportunidades para todas las personas, especialmente a las personas con discapacidad en las zonas rurales. En la provincia de Ourense el acceso a los recursos pasa por facilitar la movilidad de las personas dentro de la provincia. Las personas con discapacidad y las personas mayores que viven en zonas rurales no están recibiendo el acceso a muchos de los servicios, viven aisladas en sus hogares y sin posibilidades de participar socialmente”.
“Debemos tener en cuenta el futuro de nuestros compañeros que se ven obligados a vivir institucionalizados, porque la solución no es vivir privado de una autonomía mínima debido a que el actual sistema es asistencialista. Las entidades en el ámbito de la discapacidad reclamamos la desinstitucionalización, la prevención de las situaciones de dependencia y la discapacidad, así como el fomento de la autonomía de las personas “, afirma Laura Quintas.
Valentín Sola, presidente de Andalucía Inclusiva COCEMFE, señala que se cumplen diez años de la aprobación del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) y es “una Ley que no ha cubierto las expectativas de promoción de autonomía personal y vida independiente que necesitan las personas en situación de discapacidad o dependencia”.
Por ello, Andalucía Inclusiva COCEMFE emplaza a “un debate urgente a los poderes públicos, las fuerzas políticas, los agentes sociales y grupos de interés para reconfigurar la Ley de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia la que tras diez años de vida, necesita una modificación urgente para abordar los problemas existentes. Un logro que repercutirá en el bienestar no sólo de las personas con discapacidad y sus familias, sino en toda la sociedad”.
Desde ASEM Galicia destacan que “las personas afectadas por una patología neuromuscular ven, conforme la enfermedad avanza, que su movilidad se ve reducida y aumentan las dificultades para realizar tareas básicas de la vida diaria. Esto supone una creciente dependencia de la asistencia o cuidados de parte de un tercero por lo que la figura de un cuidador diario y continuado es trascendental”.
Desde la Asociación de Lúpicos de Asturias (ALAS) hacen hincapié en que “el lupus es una enfermedad autoinmune sistémica que provoca diversas e importantes discapacidades orgánicas. Este tipo de discapacidades implica el peligro de supervivencia de estos afectados”.