La Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Bizkaia (Fekoor), entidad perteneciente a COCEMFE, ha mantenido recientemente un encuentro con personal técnico y de dirección del Área de Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Bilbao, en el que expuso su desacuerdo ante la nueva implantación del sistema regulado de pago por aparcamiento en lo que se refiere a las personas con tarjeta de estacionamiento para personas con discapacidad y/o tarjeta europea.
Transcurridos varios meses desde la publicación de la Ordenanza de Tráfico y Aparcamientos (OTA), el estudio posterior de la misma y de las diferentes características, modalidades y tarifas en función de si se es persona conductora o no, empadronada o foránea, han llevado a la Federación vizcaína a solicitar una modificación que mantenga los derechos del grupo social de las personas con discapacidad.
Aunque se planteó la posibilidad de implementar tarifas simbólicas a partir de la segunda hora de estacionamiento en determinadas circunstancias para fomentar la rotación, esta entidad considera que las tarifas que se recogen en la ordenanza exceden lo que se podría calificar de simbólico, algo que desde el Área de Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Bilbao se han mostrado dispuestos a revisar y tenerlo en consideración.
De la misma manera, la Federación entiende que todavía hay variables que no están adecuadamente implantadas o informadas, como aquellas relacionadas con la obtención y uso del tique de estacionamiento para personas con discapacidad (TEPD).
Por otro lado, Fekoor señala que en las otras capitales del País Vasco y en la mayoría de las ciudades del país no se cobra, ni se contempla hacerlo, ningún tipo de tarifa a las personas que cuenten con la autorización para aparcar en las plazas reservadas para Personas con Movilidad Reducida (PMR).
Otro asunto sobre el que la entidad ha trasladado su preocupación respecto a las plazas de reserva PMR, es la ubicación y situación de las máquinas expendedoras y si cumplen los parámetros normativos para su usabilidad.
La Federación incide en que, para el grupo social de las personas con discapacidad y sus familias, que habitualmente tiene una mayor carga económica (ayudas técnicas, obras de accesibilidad, medicamentos, apoyos) y menor nivel de ingresos medios (mayor porcentaje de desempleo, etc.), el nuevo sistema supone un sobrecoste que antes no existía y penaliza el uso de vehículo como una ayuda técnica más.
Finalmente, y pese a que la implantación se va a realizar próximamente, Fekoor ha destacado la empatía y escucha activa de la citada Área del Consistorio bilbaíno, que ha manifestado estar abierta a posibles modificaciones en el funcionamiento de la nueva OTA tras la valoración de la opinión que la ciudadanía transmita en los próximos meses.
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