“La juventud con discapacidad, también es el futuro de nuestra sociedad”. Así lo ha defendido Anxo Queiruga, presidente de COCEMFE, en un artículo de opinión publicado en el primer número de la revista ‘Adelante’ de COCEMFE Castilla y León, en el que analiza la realidad y necesidades de esta parte del grupo social de las personas con discapacidad física y orgánica en España.
“La juventud con discapacidad en nuestro país está expuesta a una serie de situaciones que les sitúa como uno de los grupos sociales especialmente vulnerables a la exclusión”, explica Queiruga, destacando que “también tiene inquietudes, preocupaciones, ocupaciones y un largo etcétera, como cualquier joven. Son parte de la ciudadanía y forman parte del presente de nuestro país, pero también del futuro de la sociedad española”.
El presidente de COCEMFE ha señalado la falta de accesibilidad de los transportes e instalaciones como uno de los factores más discriminatorios para las personas con discapacidad, que les impide “realizar actividades básicas para cualquier persona” lo que “dificulta la participación social activa e inclusión social”.
Entre otros, la falta de accesibilidad puede suponer limitaciones y dificultades para que el alumnado con discapacidad finalice su etapa educativa. Queiruga ha recordado que “COCEMFE trabaja para que el sistema educativo sea inclusivo, cuente con más recursos y con más apoyos para la juventud que los necesite”, ya que “una mayor preparación académica permitirá acceder a mejores puestos de trabajo y reducir las elevadas tasas de desempleo que afectan a esta parte de la sociedad”.
“Los prejuicios sociales y del ámbito empresarial, así como la falta de información, conducen a una discriminación en el acceso al empleo que se ha visto acentuada con la crisis sanitaria y económica provocada por los efectos de la COVID-19”, ha apuntado Queiruga en referencia a los obstáculos que las personas con discapacidad encuentran a la hora de acceder al mercado laboral que, incluso, se acentúan cuando la discapacidad es orgánica.
En este sentido, el presidente de COCEMFE sostiene que la transición de la juventud con discapacidad a la vida adulta “tiene que contar con una serie de medidas que ayuden a mitigar las dificultades y la desigualdad de oportunidades existentes en esta etapa”. Queiruga subraya que son medidas necesarias para garantizar el acceso al empleo y a un proyecto de vida como cualquier persona joven.
Otro tema abordado es la necesidad de un diagnóstico precoz de las enfermedades que puedan derivar en una discapacidad para, después, poner en marcha todos los mecanismos preventivos y terapéuticos necesarios. Queiruga reitera que para el correcto desarrollo de las personas con discapacidad es imprescindible que cuenten, en la etapa temprana de sus vidas, “con unos servicios sociales y sanitarios coordinados que cubran sus necesidades”.
En cuanto a la socialización como herramienta de inclusión y al papel que las redes sociales juegan actualmente en las relaciones sociales de la juventud, Queiruga ha señalado que “es imprescindible que tanto el acceso como el uso de las redes sociales sean accesibles y entendibles para todas las personas y que no generen más diferencias que puedan ser el desencadenante de posibles casos de acoso y discriminación”.
El desarrollo afectivo-sexual, cuestión que preocupa a la juventud con y sin discapacidad, es según Queiruga “una cuestión que se visibiliza poco cuando afecta a niñas, jóvenes y mujeres con discapacidad, incluso se torna en un tema tabú cuando se trata de la sexualidad de mujeres con discapacidad física severa. Las mujeres con discapacidad necesitan tener acceso a una educación sexual que les permita disfrutar de una vida sexual plena, libre y las aleje de una situación de vulnerabilidad”.
“Todos estos obstáculos se acentúan más en el medio rural, donde existe un déficit en infraestructura civil y de transportes y en la cobertura de los servicios y un menor acceso a las TIC”, ha recordado Queiruga. “Es indispensable que el medio rural cuente con los recursos accesibles necesarios para satisfacerlas necesidades de las personas con discapacidad y estas no se vean obligadas a abandonar su entorno”, ha añadido.
Finalmente, el presidente de COCEMFE ha reivindicado que “es imprescindible que las familias y jóvenes cuenten con apoyos que a menudo no tienen o son de difícil acceso. La juventud con discapacidad necesita espacios en los que su voz sea escuchada, donde puedan exponer sus propuestas y cuáles son las problemáticas a las que se enfrentan en su día a día y que les impiden llevar a cabo una vida normalizada”.
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