Con motivo de la aprobación por parte del Consejo de Ministros del Proyecto de Ley Orgánica de Ordenación e Integración de la Formación Profesional, la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) hace hincapié en que la nueva ley tiene que ser inclusiva en equidad y de calidad para las personas con discapacidad, tal y como establece la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad de Naciones Unidas y el Pilar europeo de derechos sociales.
En concreto, la futura ley contiene elementos muy importantes para la mejora de la empleabilidad de las personas con discapacidad y el acceso al sistema de Formación Profesional, como son, entre otros, el principio de inclusividad, la flexibilidad para el diseño de itinerarios propios, una generalización de la formación dual, mejora, incentiva y potencia la acreditación de competencias adquirida por experiencia laboral o vías no formales, facilita la acreditación parcial o total de competencias, es un sistema integrado e incremental con orientación al aprendizaje a lo largo de la vida.
“Este nuevo sistema de formación profesional, si cuenta con el movimiento asociativo de la discapacidad y posteriormente es eficiente en su desarrollo, provocará que las nuevas generaciones de personas con discapacidad estén mejor posicionadas en el mercado laboral y mejoren sus niveles educativos actuales”, asegura el presidente de COCEMFE, Anxo Queiruga, quien hace hincapié en que esta mejora será posible “sobre todo si es inclusivo, de calidad, en equidad y suficientemente flexible y garantista de la igualdad de oportunidades y no discriminación para nuestro grupo social”.
A este respecto, Queiruga recuerda que “del alumnado con necesidades educativas específicas, tan solo el 7,9% realizan enseñanzas de Formación Profesional y en detalle el 5,9% realiza FP básica, el 1,5% grado medio, y el 0,5% restante de grado superior”. “Esto pone de manifiesto las dificultades que se encuentra el alumnado con discapacidad en sus itinerarios educativos por la Formación Profesional”, incide.
“Nos encontramos, por tanto, ante un gran reto de futuro y oportunidad, para que este nuevo sistema de Formación Profesional no deje de lado a las personas con discapacidad, tal y como ha venido sucediendo históricamente”, argumenta Queiruga, quien celebra que el proyecto de ley que sustituye el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales por el de ‘Estándares de Competencias profesionales’, crea el Sistema de Orientación profesional y la Estrategia General de Orientación Profesional e incluye como agente implicado al Tercer Sector.
En este sentido, COCEMFE, a través del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad y la participación en el Consejo Nacional de la Discapacidad, ha realizado numerosas aportaciones destinadas a que se tengan en cuenta las necesidades educativas específicas por razón de discapacidad y se garantice así el derecho de acceso de las personas con discapacidad a toda la oferta formativa, asegurando la accesibilidad, la equidad y la igualdad de oportunidades, evitando cualquier tipo de discriminación por motivo de discapacidad y proporcionando los apoyos necesarios para garantizar este derecho.
La formación, además de contribuir al desarrollo personal, es un requisito imprescindible para el acceso al empleo y, con ello, a una vida autónoma e independiente.
La promoción de la educación inclusiva, equitativa y de calidad del alumnado con discapacidad realizada por COCEMFE está alineada con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, concretamente el ODS 4 “Educación de calidad” que marca metas para 2030 como “asegurar que todas las niñas y todos los niños terminen la enseñanza primaria y secundaria” y “asegurar el acceso igualitario a todos los niveles de la enseñanza y la formación profesional para las personas vulnerables, incluidas las personas con discapacidad, los pueblos indígenas y los niños en situaciones de vulnerabilidad”.