El pasado 28 de mayo la abogada Raquel Díaz fue víctima de una agresión por parte de su marido, que derivó en ingreso en la UCI del Hospital de León como consecuencia de las lesiones.
Los informes forenses han señalado que dichas lesiones “no se corresponden con un único mecanismo casual”, sino que es muy probable que respondan a distintos momentos temporales y a un maltrato continuado y mantenido en el tiempo.
En el día de ayer, fue trasladada al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo debido a que las lesiones que presenta requieren una atención más especializada.
Desde la Confederación Estatal de Mujeres con Discapacidad (CEMUDIS), entidad perteneciente a COCEMFE, reclaman “la necesidad de que se incorporen en las estadísticas oficiales datos desagregados referidos a las secuelas derivadas de vivir una situación de violencia, en la actualidad son muchas las víctimas de violencia machista que, como consecuencia de ésta, se encuentran con lesiones permanentes que pueden derivar en una condición de discapacidad dificultando su independencia y autonomía”.
Además, CEMUDIS considera necesario “que se implementen acciones y medidas específicas para que en estos casos las víctimas reciban los tratamientos, apoyos y recursos adecuados para poder continuar su proyecto de vida con total independencia y autonomía”.
Finalmente, la Confederación recuerda que “la prevención es la parte más importante para evitar casos de violencia machista, por lo que reclamamos que se doten recursos específicos de prevención suficientes para que desde todos los ámbitos de intervención se implementen mecanismos suficientes para detectar estas situaciones de violencia machista y para proteger a las víctimas de su agresor o agresores”.