El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) aboga por la creación de un espacio sociosanitario, “cuya definición no puede quedar únicamente en manos de los gestores públicos, sino que ha de abrirse a la participación activa de la sociedad civil”, según recoge el documento de posición política y técnica que la entidad ha publicado con orientaciones y parámetros para construir un espacio sociosanitario inclusivo con las personas con discapacidad.
Bajo el título “Espacio sociosanitario inclusivo”, la obra del CERMI reproduce el documento político desde el que la plataforma representativa de la discapacidad pretende incidir en el debate institucional que mantienen la Administración General del Estado y las Comunidades Autónomas.
Una de las tesis de la publicación es que las personas con discapacidad junto con las personas mayores son “dos de los sectores sociales más directamente afectados por la construcción de este ámbito sociosanitario, ya que acumulan necesidades intensas de atención y apoyos sociales y sanitarios, que han de ser prestados de un modo coherente y armónico”.
Según el documento, “el espacio sociosanitario no puede ser una mera superposición de respuestas separadas, sanitarias por un lado y sociales por otro, y ha de incorporar como factor clave el carácter inclusivo de la discapacidad, de modo que se dirija a promover la autonomía personal, la vida independiente y la participación comunitaria, y asegure la libertad de decisión y de configuración flexible y suficiente de los apoyos”.