Con motivo del Día Internacional de las Mujeres, que se celebra el próximo 8 de marzo, la Federación Nacional ALCER, entidad perteneciente a COCEMFE, denuncia que solo el 38,75 % de las mujeres con enfermedad renal crónica están trabajando; de estas mujeres el 60,21% están trasplantadas y solo un 9,67% en tratamientos de hemodiálisis o diálisis peritoneal, factores que influyen en la búsqueda o mantenimiento de un puesto de trabajo.
Además, aseguran que el 51% de estas mujeres han tenido que cambiar de puesto de trabajo al ser diagnosticadas de la enfermedad y el 74% ha recibido apoyo psicológico, según los datos obtenidos del “Informe Preliminar Mujer y Enfermedad RC: Una aproximación a la Perspectiva de Género”, realizado en 2019 por el Grupo de la Mujer de ALCER.
“Además de tener que convivir con una enfermedad, la mayoría de las veces son las responsables del cuidado de familiares. Esto supone que tengan que renunciar en ocasiones a su carrera laboral durante un tiempo indeterminado, lo que a su vez les hace disponer de menos ingresos, menor cotización y tener mayores dificultades a la hora de reincorporarse”, asegura la entidad en un comunicado.
Asimismo, según informa ALCER, los hombres pasan de media 3,2 años para la obtención de un diagnóstico efectivo sobre su enfermedad crónica, mientras que en el caso de las mujeres esta media se eleva hasta los seis años.
“Ser mujer y tener una discapacidad por enfermedad renal crónica implica una situación de doble discriminación que a menudo pasa desapercibida, pero a la que resulta fundamental vencer para lograr la plena integración de quienes la tienen”, recuerda ALCER con motivo del Día de las Mujeres.
Por ello, el Grupo de la Mujer de la Federación Nacional ALCER quiere dar visibilidad a estas mujeres a través de una serie de videos testimonios colgados en su página de Facebook, donde las protagonistas hablan de la patología y cómo han adaptado sus vidas.