FAMMA COCEMFE Madrid ha tildado de “vergonzoso” el papel que ejercen, en la actualidad, los representantes de las distintas Consejerías de la Comunidad de Madrid en el Consejo para la Promoción de la Accesibilidad y la Supresión de Barreras (CASB), un órgano asesor del que también forman parte expertos en la materia y representantes de plataformas sectoriales.
Se trata de un organismo cuyas funciones, según el artículo 3 del reglamento que rige su funcionamiento, son, con carácter general, las relacionadas con el “asesoramiento, información, propuestas de criterios de actuación y fomento de la accesibilidad”, en virtud de lo que establece la propia Ley 8/1993, de 22 de junio, de Promoción de la Accesibilidad.
No obstante, en la actualidad, este consejo, que depende directamente de la Dirección General de Vivienda y Rehabilitación de la Consejería de Transportes, Infraestructuras y Vivienda de la Comunidad, que según la entidad madrileña “mira para otro lado” cuando de “sancionar se trata”, además de definirlo como un instrumento “poco eficaz” debido al papel que ejercen los representantes de la Administración regional en el mismo.
“Se limita a ser una herramienta al servicio del partido del gobierno de turno más que a velar por los intereses de los ciudadanos, especialmente de los que tienen discapacidad y/o movilidad reducida”, señalan desde FAMMA COCEMFE Madrid.
De las 371 denuncias sobre accesibilidad que ha recibido el Consejo entre 1999 y 2014, se cifra en 159 las que han sido resueltas sin sanción, y según la entidad ello no implica que el problema de accesibilidad se haya solucionado, sino que han sido gestionadas administrativamente.
FAMMA reitera que el propio artículo 46 de la Ley 8/1993, de 22 de junio, de Promoción de la Accesibilidad y Supresión de Barreras Arquitectónicas recoge que el Consejo tendrá, entre sus cometidos concretos, los de “recibir información de las distintas Consejerías, así como de la Federación Madrileña de Municipios, con el fin de actuar como coordinador en la materia de los distintos programas a la hora de proponer actuaciones concretas relacionadas con el tema”, así como “recibir información anual sobre las realizaciones y grado de cumplimiento de las previsiones contenidas en la presente Ley de accesibilidad, para la evaluación de los resultados de todas las actuaciones, tanto de la Comunidad como de los Ayuntamientos”.
La Federación lamenta que ninguna de las denuncias de accesibilidad mencionadas haya derivado en una sanción y reclama que se tomen medidas para dinamizar el funcionamiento de este Consejo, que podría ser muy útil y valioso para avanzar en la verdadera eliminación de barreras y para promover la accesibilidad universal y el diseño para todos.