El presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, y el presidente de COGAMI, Anxo Queiruga, se han reunido en la sede de la institución provincial para abordar la colaboración mutua y analizar los resultados del servicio de empleo de la entidad, un programa que cuenta con el apoyo económico de la Diputación y que el año pasado facilitó la inserción laboral de 2.184 personas con discapacidad en Galicia, 955 de ellas en la provincia de A Coruña.
González exaltó el “extraordinario trabajo” desarrollado por un equipo multidisciplinar de profesionales en orientación laboral y agentes de empleo para buscar los perfiles profesionales que mejor se adapten a las necesidades de las empresas y apuntó que se trata “de una ayuda fundamental para un colectivo con especiales dificultades para acceder al mercado laboral”.
En este sentido, destacó que la Diputación incrementó en el pasado mandato su aportación al programa, pasando de los 60.000 a los 90.000 euros anuales, para mantener en funcionamiento un servicio que permite que cada año alrededor de 2.000 personas con discapacidad puedan acceder a un empleo.
Por su parte, Queiruga incidió también en los buenos resultados del servicio de empleo y agradeció el apoyo económico de la Diputación para el desarrollo de un servicio que cuenta con 18.000 personas inscritas, 8.033 de ellas de la provincia de A Coruña, y recordó que las especiales dificultades de la inserción laboral de este colectivo se están agravando por las consecuencias sociales y económicas derivadas de la pandemia del COVID-19.
El Servicio de Orientación e Intermediación Laboral de COGAMI está a disposición de las personas con discapacidad que buscan trabajo y también de las empresas que requieran de su servicio, como ya lleva haciendo desde que inició en 1996.
Este servicio, colaborador del Servicio Público de Empleo de Galicia y que tiene autorización como Agencia de Colocación, si bien está situado en las siete ciudades gallegas, el equipo de profesionales en orientación laboral y agentes de empleo se desplaza también a las zonas rurales para atender sus demandas.
Cuenta con una base de datos que actualmente contempla 18.000 personas inscritas como demandantes de este servicio y con un equipo formado por 40 profesionales de orientación laboral y agentes de empleo que se encargan de orientar e intermediar entre personas con discapacidad que quieren encontrar empleo y empresas que buscan profesionales para cubrir puestos de trabajo.