Con motivo del Día Mundial de la Esclerosis Múltiple, que se celebra hoy, Esclerosis Múltiple España y la Asociación Española de Esclerosis Múltiple (AEDEM-COCEMFE), entidades pertenecientes a COCEMFE, reclaman que se comprendan y reconozcan los efectos invisibles de esta enfermedad en los procesos de valoración de la discapacidad y se reconozca de manera automática el 33% del grado de discapacidad en el momento del diagnóstico.
Por otro lado, reclaman que en el empleo, además de la protección normativa, “es fundamental el compromiso de los/as empresarios/as para adaptar los puestos de trabajo y el cumplimiento del 2% que exige la legislación en la contratación de personas con discapacidad” y aseguran que “el trabajo no tiene por qué ser un problema si los empleadores apoyan con flexibilidad a las personas con EM”.
Equidad en el acceso a las prestaciones sanitarias públicas en todas las comunidades autónomas y en todos los hospitales, principalmente al tratamiento farmacológico, es otra de las reivindicaciones de estas dos entidades, que destacan la importancia de que se vele para que no se no se produzca la intercambiabilidad de fármacos sin el consentimiento del especialista en Neurología.
Por último, piden garantizar el acceso a un tratamiento rehabilitador integral, personalizado, gratuito y continuado en todas las comunidades autónomas, reforzando el papel de las organizaciones de pacientes.
Problemas de visión y de movilidad, dolor, fatiga, mareos, espasmos musculares, sensibilidad al calor, dificultad al tragar y confusión mental e incluso depresión son algunos de los síntomas invisibles que trae consigo la Esclerosis Múltiple, la enfermedad neurodegenerativa más frecuente en adultos de entre 20 y 40 años.
En concreto, el Comité Médico Asesor de EME ha consensuado una estimación de la prevalencia de la EM cercana a los 120 casos por cada 100.000 habitantes, es decir, más de 55.000 personas en España, de las cuales, en su mayoría son mujeres con una proporción mujer/hombre de 3-1.