El grado de accesibilidad en los centros de trabajo en España es “deficiente” o “muy deficiente”, según concluye el Observatorio de la Accesibilidad Universal en los Centros de Trabajo en España 2015, presentado por Fundación ONCE en presencia de la ministra de Empleo y Seguridad Social en funciones, Fátima Báñez.
“Más de la mitad de las compañías que analiza el informe obtienen un resultado en accesibilidad deficiente o muy deficiente”, aseveró el director de Accesibilidad Universal e Innovación de Fundación ONCE, Jesús Hernández, encargado de presentar los datos.
“Los resultados”, reconoció, “no son muy positivos, pero lo importante es que a partir de este análisis las empresas pueden mejorar su accesibilidad”.
La ministra Báñez estuvo acompañada por el secretario de Estado de Empleo, Juan Pablo Riesgo; el director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ignacio Tremiño; el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán; el director general de Fundación ONCE, José Luis Martínez Donoso, y el consejero delegado de ILUNION, Alejandro Oñoro.
El objetivo de este Observatorio, según explicó Hernández, es conocer los problemas de accesibilidad más comunes que se encuentran en los centros de trabajo y analizar las causas de por qué no se avanza en esta materia.
En este sentido, el estudio distingue dos variables: por un lado, la cultura corporativa en materia de accesibilidad e inclusión laboral de las personas con discapacidad, y por otro, la accesibilidad universal en el centro de trabajo.
Así, según las conclusiones, en ambos casos se ponen de manifiesto necesidades de mejora con un resultado “aún peor en cultura corporativa”. Según explicó el responsable de Accesibilidad de Fundación ONCE, sólo las grandes empresas y aquellas que ya incorporan en sus plantillas personal con discapacidad obtienen mejores resultados.
Asimismo, en accesibilidad universal los gestores de espacios comerciales y de ocio –pendientes del cliente final- son los que sacan mejor nota. Por el contrario, los peores datos se obtienen en el sector industrial y en las pymes y microempresas.
Razones
Diversas razones explican por qué las empresas no apuestan por la accesibilidad. Según el documento, se centran en la baja empleabilidad de las personas con discapacidad, la falta de planificación y de una estrategia empresarial en esta materia, el desconocimiento de la legislación, la creencia de que hay que invertir grandes cantidades de dinero y la escasez en la demanda por parte de los trabajadores. Pero, sobre todo, que “no se percibe como una inversión sino como un gasto”, apostilló Hernández.
Por todo ello, desde Fundación ONCE apuestan por concienciar y sensibilizar a las empresas; fomentar el conocimiento de la accesibilidad universal y sobre los mecanismos de gestión empresarial de la accesibilidad; dar a conocer los incentivos y los mecanismos de control de cumplimiento normativo; mejorar la legislación vigente; promover la investigación, y difundir buenas prácticas empresariales.
Alberto Durán, vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, resaltó dos aspectos positivos que, en su opinión, revela el documento.
Por un lado, los mejores resultados en aquellas empresas donde trabaja una persona con discapacidad –”lo que confirma que estar en contacto con la discapacidad ayuda”-, y por otro, la apuesta por la accesibilidad en los sectores donde se ofrecen servicios al cliente, “donde empieza a cuajar el hecho de ver a la persona con discapacidad como un consumidor”.
“El empleo es muy importante para las personas con discapacidad y la inexistencia de barreras ayuda en el camino para llegar a mejores cuotas de inserción laboral y social”, aseveró Alberto Durán.
Por último, la ministra en funciones, Fátima Báñez, calificó este Observatorio como un trabajo “útil y responsable” que revela que la colaboración y el nexo entre entidades y organismos da resultados y suma. “Hemos avanzado mucho en el empleo de personas con discapacidad”, reconoció, “pero nos queda mucho por hacer”.