Un total de 200 estudiantes de 23 países iberoamericanos recorrerán México y España durante los meses de junio y julio de 2016, en una nueva expedición de la Ruta Quetzal BBVA. Un año más, gracias a Fundación ONCE y el Cermi, el programa está abierto a estudiantes con discapacidad que superen el proceso de preselección.
Según consta en las bases, podrán participar como “embajadores de la discapacidad” jóvenes con una discapacidad reconocida con un grado igual o superior al 33%, que deberán adjuntar en el formulario de participación un certificado oficial justificativo de su discapacidad.
Los participantes en esta modalidad serán preseleccionados por la Comisión de la Universidad Complutense de Madrid. La selección definitiva de la Embajada de la Discapacidad será llevada a efecto por Fundación ONCE y Cermi.
El proceso de participación está disponible en la web oficial del programa, www.rutabbva.com. Los aspirantes deben haber nacido entre el 1 de enero de 1997 y el 15 de junio de 1998, estar cursando enseñanzas medias, educación secundaria o universitaria y no haber formado parte de anteriores expediciones. Deberán rellenar un formulario de participación antes del mediodía del 26 de enero.
Desde 2011, la Ruta BBVA reserva dos plazas de participación a jóvenes con discapacidad en colaboración con Fundación ONCE y Cermi. El proceso de selección es el mismo que para el resto de aspirantes y una vez seleccionados, Fundación ONCE y Cermi se ponen en contacto con ellos para ver si el tipo de discapacidad puede dificultarles seriamente su participación y determinar las necesidades que pueden tener durante el viaje.
Hasta el momento, un total de cinco chicos han sido “embajadores de la discapacidad” de la Ruta BBVA: dos en 2012, uno en 2014 y dos en 2015. Los dos últimos han sido David Chiarri, joven barcelonés con discapacidad auditiva, y Adrián Rincón, estudiante con discapacidad visual nacido en Salamanca.
A lo largo de 30 ediciones más de 10.000 jóvenes han participado en la Ruta BBVA, que cada año propone la visita a un país americano y otro ibérico siguiendo las huellas de algún personaje o hecho destacado de su historia común. En esta ocasión el escritor e historiador peruano conocido como “El Inca Garcilaso” servirá de inspiración a los expedicionarios.