Los miembros de la Mesa en Defensa del Ferrocarril de Almería, entre ellos FAAM, entidad miembro de COCEMFE, se concentraron el pasado viernes ante la antigua estación de la capital para exigir la implantación antes del próximo año de un tren adaptado para personas con movilidad reducida que garantice las posibilidades de viaje.
La mesa estuvo acompañada por el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Luis Cayo, quien ha lamentado que la línea que une Almería y Madrid sea “de las pocas” que actualmente carecen de condiciones de accesibilidad, toda vez que ha recordado que a partir de 2017 la legislación obligará al Estado a tener todos sus trenes accesibles, cuestión que llevarán a los juzgados en el caso de que no se cumplan.
“No solo es un servicio lento, penoso e incómodo, sino que se nos niega porque no hay plaza H para que una persona vaya en su silla”, ha indicado Cayo, quien ha asistido a la convocatoria en representación de las 7.000 asociaciones de personas con discapacidad.
En la misma línea se ha expresado el presidente de la FAAM, Valentín Sola, quien ha recordado que en Almería hay más de 50.000 personas con algún tipo de discapacidad, por lo que ha pedido a Fomento que si a partir de septiembre va a haber un tren nuevo –un Talgo VI según el anuncio de la ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor– este sea adaptado.
La reivindicación será trasladada el próximo 19 de mayo en Madrid a los responsables de ADIF y Renfe en la reunión técnica que la mesa del ferrocarril ha reclamado durante semanas para conseguir un tren adaptado o uno de “última generación” como puede ser el Avant 101, el 130 o el 144.